KOKOPELLI RESULTA ABSUELTA EN EL PRIMER JUICIO EN SU CONTRA Y SE ENFRENTA AL SEGUNDO

Por su actividad de difusión de la Biodiversidad cultivada, la asociación se ha enfrentado recientemente contra dos procesos judiciales, ambos por la supuesta comercialización ilegal de semillas no inscritas en el Catálogo Nacional de especies y variedades de plantas cultivadas francés. La primera demanda se presenta en 2004 por parte del organismo público GNIS (Grupo Nacional Interprofesional de las Semillas) y por la FPNSP (Federación Nacional de Profesionales de Semillas Hortícolas y Ornamentales). La segunda demanda la presenta la empresa productora de semillas Graines Baumaux en diciembre de 2005.

El primer proceso se ha resuelto en marzo de 2006 con la absolución de Kokopelli, sin apelación por parte del GNIS. La sentencia se basa en la contradicción existente entre la legislación francesa para la protección de las variedades y especies vegetales cultivadas, y la normativa europea para la protección de la biodiversidad cultivada. En concreto, el artículo 17 de la polémica directiva comunitaria 98/95 emplaza a los estados miembros a articular mecanismos para la protección de esta biodiversidad “in situ” e “in vivo”, lo cual resulta contradictorio con la legislación francesa. Por otro lado, la sentencia reconoce indirectamente la labor de Kokopelli en la preservación de esta biodiversidad, y por ende la de los campesinos y agricultores que basan su cultivo en el manejo y mejora permanente de esta biodiversidad por métodos tradicionales.

La segunda demanda, a cargo de la sociedad Baumaux, se encuentra a espera de juicio, tras la interposición de un recurso por parte de Kokopelli para reunir la documentación necesaria para el juicio. El juicio se celebrará en noviembre, con la acusación de competencia desleal y de comercialización de variedades no registradas, y Kokopelli espera que esta primera sentencia absolutoria sea válida en el nuevo proceso. Por lo pronto, están realizando un gran esfuerzo para recabar apoyos de todo tipo y presionar para la retirada de la demanda. En el tiempo que ha durado el proceso judicial han conseguido 1000 nuevos socios.

A este respecto, Kokopelli ha lanzado también una campaña contra el Catálogo Nacional francés2, en relación a los ataques judiciales que está sufriendo. Considera que el catálogo y la legislación asociada suponen la privatización de todo el trabajo campesino de selección genética realizado durante milenios, y pone en peligro la propia biodiversidad cultivada, al impedir la continuación de este proceso vivo por parte de los campesinos y campesinas, auténticos creadores de este patrimonio, al impedir el cultivo de variedades y especies tradicionales. El registro de una variedad cuesta 1500 €. Además la inscripción debe contar con una caracterización que los pequeños productores o los campesinos no pueden realizar, y exige el cumplimiento de unos criterios por parte de cada variedad (Distinción, Homogeneidad, Estabilidad) que a menudo las variedades tradicionales no cumplen, por ser variedades de polinización abierta y desarrolladas de forma dinámica entre los campesinos. La prohibición de sembrar (aunque sea la semilla propia), intercambiar o comercializar semillas no registradas es una medida que, según Kokopelli, solo beneficia a las grandes empresas comercializadoras, a su potencial económico y a los híbridos que producen, que son las únicas “variedades” que cumplen con esos criterios D-H-E por ser clones de plantas madre, aunque pierdan sus características en la siguiente generación filial. Por todo ello, demandan “una ley que afirme el derecho inalienable de toda persona de cultivar, comprar, intercambiar [...] todo vegetal sin restricción legal alguna”.

KOKOPELLI: 7 AÑOS DE VIDA DE FERTIL RESISTENCIA

En la actualidad Kokopelli está formada por una plantilla de 11 personas y más de 4500 socios/as. No recibe ningún tipo de subvención, y se financia gracias al apoyo de sus socios, a la venta de las semillas y a la venta de la guía para la producción de semillas “La semillas de Kokopelli”, escrito por el fundador de Kokopelli, Dominique Guillet. La asociación Kokopelli pretende, por un lado, “poner en valor en los países europeos las variedades hortícolas tradicionales y volver a hacerlas accesibles”; y por otro “trabajar en el Tercer Mundo por la puesta en valor de técnicas de agricultura sostenible a través de la donación de semillas de variedades tradicionales y de la construcción de redes campesinas de producción de semillas y de centros de recursos genéticos”. Para realizar estos objetivos, desarrollan una intensa actividad, de la cual podemos destacar los siguientes proyectos:

  En continuidad con Terre de Semences, su actividad central ha sido recoger, caracterizar, reproducir y distribuir variedades vegetales agrícolas tradicionales. Kokopelli distribuye más de 2500 variedades distintas: 600 variedades de tomates, 250 de pimientos ó 130 de lechugas.

  La campaña “Semillas Sin Fronteras” de cooperación con países empobrecidos, comenzó en 1999 con la donación de semillas producidas en las huertas de los socios de Kokopelli a países como Brasil, Marruecos, Afganistán o Senegal. A partir de 2000 se implicaron en la creación de centros de formación y producción de semillas, como India, Senegal o Mali. Por último, desde 2005 han comenzado a organizar seminarios de formación para población campesina e indígena en la producción de semillas tradicionales.

  Campaña de apadrinaje “Adopta una semilla”. Cada socio puede ser el depositario de la reproducción de una o más variedades de las que constan en el catálogo de la asociación. Las semillas así producidas se pueden intercambiar entre los distintos socios, y son también las que se ceden a agricultores de los países empobrecidos en la campaña “Semillas sin Fronteras”. Entre 2000 y 2001 se enviaron de esta forma más de 150.000 sobres de semillas a países de Asia, África o América Latina.

  Un servicio “on-line” de distribución de semillas, desde el cual se puede acceder a dos gamas de semillas: La gama “Boutique”, con más de un millar de variedades, producidas por profesionales de distintos países de Europa. Y la gama “Colección”, con variedades menos conocidas o cultivadas, producidas principalmente por los socios de la Asociación y que están disponibles de forma gratuita para todos los socios y socias.

  Un programa de formación en la producción de semillas en países europeos, que realiza seminarios a nivel profesional o semiprofesional para grupos que lo solicitan.

NOTAS AL PIE:

1. Artículo escrito con la colaboración de Gregory Gallmann y Sabine Gnädinger, de la cooperativa Longo Maï-Mas de Granier (Francia).

2. http://www.univers-nature.com/signez/?code=cat

PARA MAS INFORMACION SOBRE EL PROCESO:

http://kokopelli.asso.fr

Si quieres escribir a los demandantes:

[email protected]